miércoles, 7 de marzo de 2012

OÍR y ESCUCHAR IMPORTANTE DIFERENCIA

En el trabajo,  en el hogar, en la calle, con los amigos (as), con la familia… que interminable se hace la lista si nos ponemos a pensar en la importancia de saber ESCUCHAR y cómo influye en nuestras vidas y en la de los demás.
Hace unos días lanzamos una pregunta por nuestra red social, cuál era la diferencia entre OIR Y ESCUCHAR… para algunos significa lo mismo y otros saben que existe diferencia, pero no determinan claramente cual es.
Aquí va la respuesta…
Pero antes de empezar con la explicación, debemos comprender que la condición humana tiene dos ámbitos HABLAR  y ESCUCHAR, ambas para nuestra consideración son acciones activas, y decimos esto ya que el punto de entendimiento de una conversación no está en el  hablar sino en elESCUCHAR.
Aquí surge un nuevo problema que siempre es motivo de queja, “no nos entienden cuando hablamos” o “no nos escuchan como deseamos”.
Ahora que sabemos que Escuchar está ligado con el habla  y viceversa,  según el orador y el receptor y sus mundos internos, podemos indagar  en la diferencia de oír y escuchar
OIR, es u fenómeno biológico natural, nacemos algunos con esta característica que nos permite diferenciar los sonidos del mundo, un llanto de bebe, un carro en movimiento, una campana, un grito, etc.
ESCUCHAR,  es una característica biológica también que deriva de oír pero la diferencia se marca si entendemos que Escuchar proviene del campo del lenguaje y que esto nos permite relacionarnos con los demás.
Cuando un amigo, conocido, familiar o persona desconocida se nos acerca y empieza una conversación, nosotros como seres lingüísticos estamos empezando el proceso de oír, pero más que eso empezamos a  escuchar ya que INTERPRETAMOS y comprendemos  lo que el orador nos dice y formamos nuestros juicios, creencias, costumbres, etc. a partir de nuestra  forma de ser.
Por esta razón apoyamos la idea, que la diferencia  de Oír y Escuchar recae claramente en reconocer  que el  acto de ESCUCHAR genera un mundo interpretativo.

Ahora, tengamos en cuenta que la emisión de los sonidos no solo nos da las pistas para escuchar correctamente ya que los silencios también pueden ser leídos, interpretados y por supuesto entendidos.
Por ejemplo, si estamos en un súper mercado y le pedimos a la cajera que por favor nos brinde el costo de un  producto y no obtenemos respuesta lingüística, estamos escuchando su silencio, interpretamos una negativa de parte de la cajera y esto viene a acompañado de nuestros juicios y creencias que automáticamente se forman de esa experiencia o característica de la persona.

Si deseamos no llenarnos de juicios no fundados gracias  a nuestras experiencias sólo debemos usar la herramienta de Coaching, “LAS PREGUNTAS”, ya que es la única forma que nos ayudará a fundar y  comprender los hechos o la realidad del orador, lo cual nos permite crear historias coherentes y fundadas.

Espero amigos haberlos ayudado y recuerden que muchos de los problema que pasan en el mundo surgen por no saber escuchar. Comuniquémonos con amor y todo saldrá mejor!!!

ESCUCHAR    =   INTERPRETAR
OIR            =          SONIDO
OIR + INTERPRETAR = ESCUCHAR

Doris Caballero
Comunicadora - Coach
COACHING DIRECTO
www.coachingdirecto.com

jueves, 1 de marzo de 2012

El arte de pelear sin pelear..

Es una de las grandes enseñanzas del Tao te king de Lao Tze, a su vez una de las grandes estrategias expuestas en el arte de la guerra, de Sun Tzu. Y tiene mucho que ver con el principio fundamental del Judo, el Aikido, el Taichi, entre otras artes marciales llamadas blandas.
Puedo resumir lo expuesto en una de las frases más usadas por Morihei Ueshiba fundador del Aikido, ó Jigoro Kano fundador del Judo: "Ceder para vencer".
En efecto, si una fuerza de 80 kilogramos viene hacia ti, a una velocidad de 20 K/h, y tú pesas 70 Kg, fuera de tu estado físico, lo más probable es que te lastime. 
En el arte de pelear sin pelear, no resistes esta fuerza de 80 Kg, si no la usas a tu favor, esquivando y aplicando tú, una fuerza de 20 Kg, por poner un ejemplo, lo que sumado a la fuerza de 80 Kg del atacante sería una estrepitosa caída de 100Kg fuera de la velocidad que uses.
Imagínate si usas más fuerza...y mayor velocidad.
Este principio no tiene que ver sólo con artes marciales si no con la vida misma, y esa es la filosofía de las artes marciales que personalmente, me interesa. 
Por ejemplo, cuando alguien profiere adjetivos, ó palabras que vienen con una fuerza emocional muy intensa, cuando el jefe nos acusa injustamente, cuando un compañero de trabajo nos agrede verbalmente, cuando un hermano sientes que te desilusiona con algo que dice. En muchos casos podemos aplicar el arte de pelear sin pelear, que puede resumirse en algo así como: "no entrar al choque y antes procurar que el otro no se lastime".
Una actitud mental clásica, muy usada en artes marciales es el estado de "no mente", sin juicios valorativos, la cual es una actitud zen clásica, muy ligada al vacío zen, (que no es la nada) y lo que en coaching podría usarse como la posibilidad de miradas, ó como un profesor de budismo me decía, "el mar abierto, infinito de posibilidades..."

Luis Guillermo Mendoza Velarde
Coachingdevida-zen